Una historia de terror
Se vivía un aire de paz y algo de tranquilidad en la Ciudad de Monterrey en México, por el año de 1933, una ciudad que comenzaba a crecer, mejorar económicamente, evolucionando al tiempo en el que se estaba viviendo.
Pero un día, un 5 de Abril se descubriría un terrible crimen que desató el terror en la ciudad, horrorizó a todo el mundo.
Las encontró entre sangre y desorden, degolladas y abusadas sexualmente, la escena era una película del más sangriento terror, la noticia corrió por las calles como la velocidad de la luz, la gente pronto se enteró de todo.
La población y en especial el afectado, exigieron justicia rápida y efectiva.
Lo extraño del caso fue que las puertas y ventanas no fueron forzadas, lo que llevó a pensar que el autor o los autores del crimen eran conocidos de la familia.
Tras un análisis se concluyó que inicialmente era un robo pero éste se complicó de una manera inimaginable. Varias pistas llevaron a dos sobrinos de la señora Delfina y a otros dos vecinos cercanos, entre ellos algunos rastros de sangre que quedaron en calles aledañas. Tras los interrogatorios se confirmó que los cuatro estaban implicados en el homicidio, ellos confesaron el hecho.
Se trataba de los jóvenes Gabriel Villarreal, Emeterio González de León y los hermanos Heliodoro y Fernando Montemayor. La mejor pista que de dice que hubo fue un loro que se encontraba en la Casa de Aramberri, mascota de los Montemayor, repetía con frecuencia “diles que no me maten Gabriel”, factor que facilitó la captura realizada por los agentes policiales.
Al difundirse la noticia de la captura de los cuatro asesinos, la población rondaba las instalaciones de la Policía, buscando linchar a los criminales. Durante la diligencia un comando armado les disparó, situación que fue aprovechada por los cuatro delincuentes para intentar huir, por lo que tuvieron que dispararles para evitar la fuga, provocándoles la muerte de manera instantánea.
Posteriormente los restos de los cuatro asesinos fueron expuestos en Monterrey para tranquilizar a la población.
Se dice que se comenzaron a escuchar cosas y la gente decía que se veían sombras, algunos investigadores paranormales hicieron búsquedas para comprobar la actividad que ahí había. Finalmente, en 2019 la casa fue puesta a la venta y de inmediato “surgió un valiente” que pagó por ella 3 millones de pesos.
Autor: Duquesa (Duqueliciosa)
Fuente: Foro del Chat de Escalofrío
(QM)